Primer proyecto de nuestro programa de diseño comunitario y territorial, donde Estudio Vástago financia el 100% del proceso de branding para impulsar iniciativas prometedoras de nuestro territorio.
En Estudio Vástago creemos que el diseño puede ser una herramienta para fortalecer el tejido social, honrar las raíces y proyectar nuevas posibilidades. Con Granja Las Acacias inauguramos nuestro programa de diseño comunitario y territorial, una apuesta por reconocer y acompañar proyectos que nacen desde la autenticidad de nuestro entorno.
Este no es solo un ejercicio de branding: es la oportunidad de contar la historia de una familia que convirtió su hogar en un espacio de encuentro, abundancia y memoria compartida. Desde la escucha profunda hasta la representación gráfica, nuestra tarea fue transformar la sensibilidad de la vida cotidiana en un sistema visual coherente, emocional y con proyección.













Más que un escudo de armas, Las Acacias tiene un escudo de amares: un símbolo que protege desde la hospitalidad y florece desde el territorio.
La identidad de Las Acacias se sostiene en un símbolo que combina lo íntimo y lo universal: una flor inspirada en el pétalo de la acacia. Esta figura central se convierte en metáfora del cuidado, del alimento y de la vida que florece en comunidad. Cada pétalo representa un valor esencial: hospitalidad, familia, territorio y transformación.
A su vez, reimaginamos el lenguaje de la heráldica. En lugar de un escudo de armas, optamos por un escudo de flores, un escudo de amares. Este gesto cambia la lógica de defensa por la de hospitalidad, resignificando la tradición visual en clave de confianza, calidez y pertenencia. El resultado es un emblema que protege, sí, pero desde la ternura y la abundancia compartida.
La paleta cromática fue pensada para transmitir la riqueza del lugar: tonos tierra, verdes oliva, terracota y el amarillo acacia evocan la conexión con la naturaleza, la fertilidad del campo y la calidez de los encuentros alrededor de la mesa. Estos colores no solo definen un estilo visual, sino que comunican un estado de ánimo: familiaridad, confianza y vida en plenitud.
El sistema gráfico se completa con aplicaciones que refuerzan la experiencia sensorial: delantales, camisetas, señalética, empaques y elementos impresos que convierten cada interacción en una extensión del espíritu de la granja.













Con este proyecto, Estudio Vástago reafirma su compromiso de diseñar marcas con alma, que nacen desde la escucha activa y se construyen con respeto por la historia y el territorio. Granja Las Acacias es un ejemplo de cómo el branding puede ser más que una herramienta de mercado: puede convertirse en una declaración de identidad, un puente de confianza y una oportunidad para transformar lo cotidiano en memoria compartida.